En 2015, nuestra compañía Caston tomó una orden de un distribuidor reconocido de equipos de perforación con sede en los Estados Unidos. El pedido de barras de perforación debía cumplir al pie de la letra con condiciones especiales de fabricación. Por lo tanto, adquirimos un lote de materiales especiales y diseñamos parámetros técnicos particulares que distaban mucho de los productos estándar del mercado. De acuerdo a los diseños y planos presentados, la longitud de las barras superaba 150mm; además tenían que ser 3mm más delgadas. Procedimos entonces a realizar los procesos de contracción, engrosamiento, elongación, así como la reducción del grosor de las paredes durante el periodo de forjado. Nos dimos cuenta que el material que adquirimos se endurecía bastante después del tratamiento térmico, sin embargo, aparecían grietas en la superficie de las barras de perforación debido a las propiedades de los materiales y el espesor de las paredes 3mm más delgado. Antes de acudir a nosotros, este distribuidor estadounidense ya lo habían intentado con muchos otros fabricantes competentes sin que ninguno de ellos pudiera ofrecerle el tipo de barras que estaba buscando.
Luego de un periodo de investigación, los expertos de Caston pudieron encontrar un nuevo método de forjado y tratamiento térmico que reemplazó a los métodos tradicionales. Se realizaron ajustes en la técnica de calentamiento, medios de revenido, proporciones de líquidos, temperatura y tiempo de aislamiento. Finalmente, estos ajustes dieron resultados, cumpliendo con los parámetros técnicos de desempeño mecánico de las barras de perforación para este cliente. Posteriormente, firmamos un acuerdo de confidencialidad técnica para proteger nuestra innovación.